Región de Atacama, Chile: Registros históricos

 Literatura: Ferrocarriles en 1890

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Hugo Kunz (1890) se refiere de la planificación de un ferrocarril entre Copiapó y Argentina que debería mejorar los contactos comerciales entre Atacama y Argentina
Texto Original:

Pero todavía hay una buena posibilidad que la situación en futuro  se mejora a favor de Caldera. Eso ocurría sí al fin se realizaría la prolongación, ya 40 años en planificación, de la línea ferrocarril Caldera - Copiapó hacia el portezuelo andino San Francisco a la provincia Catamarca en Argentina, donde desde hace años existe la continuación de Chumbicha a Córdoba, Santa Fe, y Rosario hasta Buenos Aires, el señor Wheelwright ya se movió desde los inicios de los trabajos del primer trayecto entre Caldera y Copiapó en el años 1850 a favor del  proyecto trasandino; en el año 1870 el ingeniero San Roman  agita  enérgicamente a favor de una realización del proyecto de Wheelwright - y el logró una competencia peligrosa al proyecto de Clark (línea Uspallata), y sí hubiera logrado una separación entre los interesados de un ferrocarril trasandino, seguramente el proyecto de Clark, cual sin duda es el más importante, había sufriendo un fuerte retraso.

Alrededor del año 1873 se abandonan este proyecto temporalmente. El tiempo siguiente no era muy adecuado para proyectos grandes, especialmente líneas internacionales entre Chile y Argentina, cuales no estaban en esta época muy conformes entre sí, sobre el trayecto de algunos sectores limítrofes. Después siguió la guerra con Chile y Perú y sus consecuencias.

Actualmente ya se acostumbró a las consecuencias, tal vez ya son superados, y existe una cierta tendencia a favor de proyectos ferroviarios en Chile, cual no es seguro de excesos - y es más que normal que nuevamente esté proyecto salió a la luz.
El empuje formal dieron esta vez empresarios ferroviarios argentinos  (Empresa Carranza in Buenos Aires) cuales se conectaron con el directorio del ferrocarril Caldera-Copiapó, cual seguramente le conviene una continuación de la línea, por que sus dividendos ya se bajaron desde el año 1884 a 5% y con la prolongación ganarán en todas maneras.   El directorio por si mismo se acercó al gobierno para lograr un apoyo (por supuesto se trata de una garantía estatal de intereses por capital invertido) del intendente. El ultimo al fin destacó - al gobierno del país el plan como "desideratum" de la provincia.
Sí este proyecto se pone realidad, Caldera sería una alternativa - una competencia por Valparaíso en la exportación de los productos del noroeste de Argentina a puertos chilenos. Pero en el mismo momento sería posible que se abren nuevas grandes minas de cobre y plata cuales actualmente no son rentables por sus altos costos ⁽¹⁾. Hasta entonces el comercio entre Argentina y Chile se concentra entre Mendoza a Valparaíso. Pero se teme que la influencia de los "haciendados" en las cámaras del gobierno con  argumentos estratégicos como que el ferrocarril podría servir de puerta de invasión a causa de los portezuelos anchos y cómodos, el proyecto al final no se concreta ⁽²⁾.

Harding 1919 - sector de la futura planificación de la línea trasandina.