Región de Coquimbo, Chile: Registros históricos

Literatura: Charles Darwin

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Texto Charles Darwin: Coquimbo
chap. IX. Terrazas de Gravas de Coquimbo. p.252-254

Valle de Coquimbo. La estrecha llanura costera envía, como se ha dicho antes, un brazo, o más correctamente una franja en ambos lados, pero sobre todo en el lado sur, a varias millas del valle. Estos franjas se llevan en peldaños o terrazas, que presentan una apariencia muy notable, y han sido comparados (aunque no muy correctamente) por el capitán. Basil Hall, a las vías paralelas de Glen Roy en Escocia: su origen ha sido hábilmente discutido por el Sr. Lyell. 1 La primera sección que voy a dar, no se dibuja a través del valle, sino en una línea este y oeste en su desembocadura, donde las terrazas formadas por escalones debouch y presentan sus muy suavemente inclinadas superficies hacia el Pacífico.

La llanura inferior (A) tiene una anchura aproximada de una milla, y se eleva insensiblemente desde la playa a una altura de veinticinco pies al pie de la siguiente llanura: es arenosa, y está llena de conchas.

La llanura o terraza (B) es de poca extensión, y está casi oculta por las casas del pueblo, al igual que el acantilado de la terraza (C). A ambos lados de un barranco, a dos millas al sur de la ciudad, hay dos pequeñas terrazas, una encima de la otra, que corresponden evidentemente a (B) y (C); y en ellas abundaban los restos marinos de las especies ya enumeradas. La terraza (E) es muy estrecha, pero bastante distinta y llana; un poco al sur de la ciudad había vestigios de una terraza (D) intermedia entre (E) y (C). Terraza (F) es parte de la llanura marginal, que se extiende a lo largo de las once millas a lo largo de la costa; aquí se compone de teja, y es 100 pies más alto que donde se compone de materia calcárea. Esta mayor altura se debe obviamente a la cantidad de guijarros, que en algún momento anterior se ha derribado el gran valle de Coquimbo.

Teniendo en cuenta las numerosas conchas esparcidas por las terrazas (A) (B) y (C), y algunas millas hacia el sur en la llanura calcárea, que está continuamente unida a la llanura escalonada superior (F), no cabe la menor duda de que estas seis terrazas han sido formadas por la acción del mar; y que sus cinco escarpes marcan tantos períodos de descanso comparativo en el movimiento elevatorio, durante el cual el mar se adentraba en la tierra. La elevación entre estos períodos puede haber sido repentina y en un promedio de no más de setenta y dos pies cada vez, o puede haber sido gradual e insensiblemente lenta. Desde las conchas de las tres terrazas inferiores, y en la superior, y puedo añadir las tres terrazas de grava en Conchalee, siendo todas las especies litorales y sub-litoral, y a partir de los hechos analógicos dados en Valparaíso, y por último de la evidencia de un lento aumento últimamente o todavía en progreso aquí, me parece mucho más probable, que el movimiento ha sido lento.

La existencia de estos acantilados sucesivos, o antiguos acantilados, es en otro sentido muy instructiva, pues muestran períodos de descanso comparativo en el movimiento elevatorio, y de denudación, lo que nunca se habría sospechado de un examen minucioso de muchas millas de costa hacia el sur de Coquimbo. .
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